Cuando la respuesta está en un grupo de Facebook

Muchas veces se hace un uso superficial (también válido, claro) de las redes sociales. A menudo para muchos usuarios no va más allá de un mero entretenimiento: leer, comentar, subir una foto,… e incluso ‘trollear’. Por otro lado están las empresas, batiéndose el cobre en las redes para conseguir fans o followers, promocionarse, atender a sus clientes… En medio de todo esto y más, se encuentra un padre, Diego, desconsolado con la enfermedad de su hija.
Diego un día decide introducir todas sus esperanzas en un mensaje que difunde por todos los grupos que encuentra en Facebook relacionados con la epilepsia que padece su pequeña. Busca otros afectados por la mutación del gen PCDH19, una enfermedad rara detectada muy recientemente. Los síntomas descritos en el mensaje de Diego coinciden con los de la hija de Sara, una madre de Barcelona. Tras varias conversaciones, Sara realiza unas pruebas genéticas a su hija, que resulta diagnosticada por la misma enfermedad.
Con su acción, Diego no sólo logró su objetivo, sino que ha dado la oportunidad a la hija de Sara de comenzar a recorrer el camino de la mejora de su calidad de vida. Una oportunidad que, sin la ayuda de la conexión a través de Facebook, quizás no habría llegado, o lo habría hecho mucho más tarde.
Como he comentado en otras ocasiones, la formación de grupos sobre diversos temas fomenta el asociacionismo, una herramienta básica para el aprendizaje mutuo y el aumento del conocimiento personal y colectivo sobre un determinado interés. Además, las redes sociales son buenos transmisores de otros valores humanos imprescindibles como la solidaridad y la cooperación, muy importantes sobretodo hoy día para sacar adelante iniciativas que puedan paliar en buena medida las carencias en determinadas situaciones que vivimos en la actualidad. 
Iniciativas que, además de información, necesitan recursos económicos, y aquí es donde entran las plataformas de crowdfunding, de las cuales las redes sociales son las mejores aliadas. Un ejemplo: la actual campaña que ha comenzado FEDER para recaudar fondos para las personas con enfermedades raras. Recientemente he leído un post muy interesante sobre el tema que quería compartir con vosotros, en el que Ricard Valls, consultor de marketing social, analiza el fenómeno del crowdfunding: plataformas, usos, recaudación, potencial…

La historia de Diego es sólo un ejemplo de lo que sucede cada día en las redes sociales. Miles de personas prueban a buscar a través de ellas la respuesta, en forma de dato, donación, apoyo o consejo. Pero como siempre digo, para no abrir puertas en falso, lo más importante es contrastar la información que se obtenga en las redes sociales con los profesionales o asesores cualificados en la materia.